En un inesperado giro del destino, un prominente empresario francés, conocido por ser descendiente del icónico imperio de bolsos de lujo Hermès, está envuelto en una controversia pública que ha captado la atención de todo el mundo. Con 80 años y sin hijos ni familiares cercanos, Nicolas Puech ha tomado una decisión que ha generado un gran revuelo: adoptar a su ex jardinero de 51 años y convertirlo en su heredero.
La batalla por la herencia
Puech, un reservado descendiente de quinta generación de Thierry Hermès, fundador de la prestigiosa marca en 1837, ha iniciado un proceso legal para adoptar formalmente a su antiguo jardinero, un hombre de origen marroquí cuya identidad se mantiene en el anonimato. Esta adopción implicaría legar la mitad de su fortuna, valorada en 12 mil millones de euros, al jardinero, según informes de medios europeos.
Esta sorpresiva decisión ha desencadenado una disputa con la Fundación Isócrates, una organización benéfica fundada por Puech en 2011. La fundación, que hasta ahora se ha dedicado a financiar el “periodismo de interés público” y organizaciones de la sociedad civil que promueven una digitalización responsable, ha expresado su oposición formal a la cancelación del acuerdo sucesorio que vinculaba la fortuna de Puech a sus actividades benéficas.
La Fundación Isócrates responde
En un comunicado oficial, la fundación declaró que no está en posición de juzgar las intenciones de Puech de adoptar a su ex empleado, pero señaló que “la anulación abrupta y unilateral de un acuerdo sucesorio parece nula e infundada desde un punto de vista jurídico”. Asimismo, destacaron que, como organización benéfica con sede en Suiza, están bajo la supervisión del consejo federal suizo de fundaciones.
Puech se defiende
Distanciado de la mayoría de su familia, Puech ha enfrentado crecientes tensiones internas que se remontan a más de una década, comenzando con una oferta de adquisición hostil por parte de LVMH, el conglomerado de moda propiedad de Bernard Arnault, el segundo hombre más rico del mundo. Aunque la familia Hermès logró frenar la adquisición al crear un holding que ahora posee más de la mitad de las acciones de la empresa, Puech mantuvo su participación individual, que representa aproximadamente el 5,7% de Hermès.
El valor de Hermès se ha disparado en los últimos años, con sus acciones cuadruplicándose desde la primavera de 2020. Este aumento ha llevado el valor de mercado de la empresa a 209 mil millones de euros, lo que hace que la participación de Puech valga poco menos de 12 mil millones de euros.
El futuro incierto
Puech ocupa actualmente el puesto 162 entre las personas más ricas del mundo, con un patrimonio neto estimado en 11.500 millones de dólares. Su plan de entregar una gran parte de su fortuna a su ex jardinero ha generado una mezcla de asombro y controversia. La decisión de Puech parece estar impulsada tanto por las tensiones familiares como por su deseo de asegurar el futuro de alguien cercano a él en quien confía plenamente.
Ante la creciente especulación mediática, un portavoz de Puech ha sugerido la posibilidad de una conferencia de prensa para “separar los hechos de la ficción y disipar algunas de las tonterías que se han publicado en los medios”. Lo cierto es que, en un mundo donde las fortunas familiares suelen permanecer dentro de la misma, la decisión de Puech de adoptar a su ex jardinero marca un precedente sin igual en la historia de la familia Hermès.